Literaria
     Mes de marzo,  ya  los días  igualaban  con 
las noches,  marzo igualarzo; la primavera se
iba  haciendo   cada  vez  más   visible  en  los
sitios más calientes, ya se veían abreotas y las
merendeiras o sea las flores que denunciaban
o anunciaban la merienda.

     En   este   mes   se   podaban   los   árboles 
frutales  y  se  cortaba   leña   de   roble   para
secarla   durante   el   verano   para   después
quemarla en el invierno. Se  seguía  indo a la
sierra  días  intercalados para ir  aumentando
la  cosecha de  los   torgos,   pues   ahora   era
cuando mejor se arrancaban porque  la tierra
estaba  blanda del  invierno.
     Los rebaños ya  llegaban hasta el final  de
los montes,  los  pastores  venían  cantando  y
alegres,   seguramente   más   satisfechos  que
vosotros,   jóvenes   de   ahora,   cuando  a  la
mañana  venís   de  la  discoteca  a  meter  los
cuernos en la cama.  No te  olvides que la  luz
del  Sol  es  mejor  que  la  luz  eléctrica  y  se
conserva mejor la vista.
     Por  San José 19 venían las anduriñas que
con su  presencia  alegraban  el  ambiente  de
estos pueblos campesinos;el invierno quedaba
atrás, no quedaba más que el recuerdo de  sus
tertulias y fiadeiros; para los jóvenes también
se había  acabado el tiempo escolar,  ahora el
colegio era el pastoreo, las ovejas,  las cabras
y los corderos,  y a  punto  de  salir  las  vacas
que   estaban   encerradas   desde  el  mes   de
diciembre. Se ajuntaban los palleiros, pues de
tanto sacarle paja durante el invierno estaban
muy delgados y los fuertes aires de  marzo  los
tiraban; también estaban bastante debilitados
los palleiros y pajares, apenas  tenían  hierba,
se anhelaba  el  buen  tiempo  para  echar  las
vacas al prado.
     Se empleaba mucho el mes de marzo  para
hacer  obras  nuevas  y   remendar  las  viejas,
pues como aún en el campo  no  se  trabajaba
mucho  abundaban  mucho   las obras  en  las
casas y pajares;  se  hacían  casas  nuevas,  se
renovaban las viejas, en las mismas fincas, en
prados  y  tierras  se  hacían  cercos de piedra,
testigo de ello son los que actualmente aún se
ven  por   todo   el   distrito   campesino,   muy
deteriorados  ya  porque  se  van  cayendo,   y
como   nadie  los   levanta   el  terreno  los  va
cubriendo.   Pero   son   de    admirar    si    se
considera   el     grandísimo    esfuerzo    para
hacerlas .  ¡  Cómo      trabajaban      nuestros
antepasados,  dignos   son  de  un  recuerdo  !.
Que  Dios  los  tenga  en  la gloria  y  allí  nos
esperen.

     Que cambio tan radical acordamos los que
actualmente aun  vivimos,  nuestros  mayores
cuando la edad le había llevado sus fuerzas  y
no podían trabajar,  iban con  las vacas hasta
los últimos días de su vida y mismo soy testigo
de algunos  que  murieron en  los prados  con
sus   vacas.    Nosotros    con    las   vacas   no
moriremos porque no las tenemos.

     Bueno  marzo  escribiendo  tus labores me
has  traído  a la memoria  temas  que encajan
en tu historia  pero yo  las escribí  y  vuela  tu
historia para  despedirme  de ti,  tengo  ganas
de venga abril  y  mientras  tanto ya riego  los
prados con más intensidad y tu calientas para
que echen hierba para  las vacas,  para poder
echarlas,la hierba del pajar se acaba.

     Adiós marzo.

 
    
Faenas de Lamalonga 
en el mes de Marzo